Un cementerio en una torre, una torre en Zaragoza que es territorio italiano, una iglesia con símbolos ocultos... GozARTE propone y nosotros los seguimos allí donde vayan.
Dentro del
ciclo “DESCUBRE ZARAGOZA ESCONDIDA”, gozARTE nos propuso una visita muy
especial. Nos invitó a adentrarnos en la torre de la zaragozana iglesia de San
Antonio. El título de la visita: Un cementerio en una Torre.
Una visita
organizada por GozARTE, un cementerio, una iglesia, historias desconocidas de
nuestra ciudad… el plan tenía todos los ingredientes para ser más que
interesante.
Así que una
mañana de domingo, que amaneció muy lluviosa, como anticipándose un poco a las tristes
historias que íbamos a escuchar, nos encontramos con Maribel, nuestra
entrañable cicerone para esa mañana otoñal.
La iglesia de San Antonio de Padua, tiene una estructura imponente, regia, con grandes muros y un
torreón que domina toda la ciudad. Su estructura recuerda más a una fortaleza
que a una iglesia. Pero hoy no trataríamos historias religiosas ni hablaríamos
de arquitectura, la visita de aquel día nos adentraría en el enorme torreón
para descubrir una historia increíble.
Y es que, lo
que nunca habríamos podido imaginar los cientos de veces que hemos pasado por
delante de esa iglesia, es que la torre es en realidad un panteón, donde
reposan los restos de los italianos muertos en la Guerra Civil Española.
Pero antes,
Maribel nos expuso los antecedentes de
esta torre y nos explicó su motivo.
Así pues, los
primeros monumentos-cementerio de este estilo, los encontramos en el Norte de
Italia y se construyeron para los caídos en la Primera Guerra Mundial. Tan
impresionantes algunos que en ellos descansan para siempre los restos de
100.000 soldados, aunque la mayoría de ellos sean desconocidos.
Os podréis
imaginar la magnitud de estos monumentos funerarios, tremendos y
sobrecogedores.
La historia
de nuestra torre, comienza con el envío de 75.000 legionarios italianos por parte
de Mussolini en apoyo al levantamiento contra la República Española. Con este
contingente también viajaba un capellán que registraba dónde iban quedando los
caídos en combate. Pero no solo eso, sino que cada fallecido era enterrado con
una botella atada a una de las extremidades donde figuraban sus datos y según
estuviera atada a un brazo o pierna, podría adivinarse también el rango del
difunto.
En Aragón se
dio el mayor número de legionarios caídos en combate y además, Zaragoza fue una ciudad fundada por
César Augusto y los fascistas italianos pretendían recuperar el esplendor del
Imperio Romano, así que la ciudad fue la elegida para albergar este monumento.
Por eso, aquellos que saben mirar, reconocen decoración fascista en muchos de
los elementos de esta iglesia.
La primera
piedra se pondría en 1941, pero el proyecto no llegaría nunca a completarse
según el plan inicial. La postguerra española trajo consigo una brutal falta de
suministros y además de eso Mussolini había caído, así que la construcción se
retoma pero serviría como panteón para todos los caídos, es decir, allí yacen
tanto legionarios como brigadistas que vinieron a defender y apoyar al bando
republicano.
Además de
muchas cosas que quedaron inacabadas, la torre pasó de 72 metros ideados inicialmente
a 42 metros, aun así es de impresiónate envergadura y desde lo más alto
contemplaremos una de las vistas más completas de Zaragoza y además, nueva para
nosotros.
Ahora que
sabíamos la historia y los antecedentes de este lugar nos disponíamos a subir a
la torre, pero quedaba un pequeño trámite por cumplir. Nos adentrábamos en
territorio italiano, así que había que dejar constancia de nuestro acceso
firmando y consignando nuestro DNI y este listado sería enviado al vicecónsul
italiano y quedaría registrada nuestra visita.
Se accede
por una pequeña capilla, donde se muestra una maqueta de lo que habría sido el
edificio si se hubiera seguido el desarrollo planificado inicialmente y
procedemos a subir por las rampas que llevan hasta lo más alto.
Ante nuestros ojos desfilan 4.000 nombres aunque hay menos cuerpos por dos motivos: porque algunos fueron repatriados a petición de la familia y porque no se recuperaron todos los cuerpos. Muchos fueron los brigadistas que desaparecieron ya que no llevaban el sucinto control de caídos que los capellanes de los legionarios elaboraban y Franco no dio facilidades para su recuperación.
Alguna
fotografía, solitarias flores o notas dejadas por familiares, son los únicos
objetos que vemos en este silencioso lugar y que nos recuerda que es un
cementerio.
Si queréis conocer más, historias interesantes, canciones de la época o destinos trágicos, os recomendamos la visita de gozARTE.
La torre
está abierta al público y se puede acceder siempre que sea de día (pues la luz
eléctrica no es su elemento más característico) e identificándose a su entrada,
como nosotros hicimos.
Un lugar
interesante, desconocido para la mayoría de los zaragozanos, que nos traslada a
territorio italiano y a imaginar terribles destinos e historias de los que allí
descansan el sueño eterno.
Qué sitio tan curioso! Ya voy a tener cosas que ver cuando vaya por tu tierra
ResponderEliminarUn cementerio de soldados fascistas que vinieron a derribar un gobierno democrático, donde apenas hay unos 20 brigadistas, enterrados en los años 80, junto a esos repugnantes criminales. A día de hoy se siguen haciendo aquelarres fascistas en esa iglesia para oprobio de todo democrata que se precie.
ResponderEliminarTampoco es así exactamente. Si bien el Sacrario y la iglesia pertenecen al gobierno italiano, los capuchinos pueden disfrutar de la iglesia en usufructo a cambio, entre otras cosas, de oficiar cada dos de noviembre un Te Deum en memoria de los italianos caídos en la Guerra Civil. Durante muchos años, los asistentes a este Te Deum eran los familiares y descendientes de estos caídos pero, por desgracia, hay quien sigue apropiándose de símbolos ajenos de manera perversa y, como bien dices, ahora son grupos fascistas quienes utilizan la celebración de dicho Te Deum para montar sus follones.
EliminarUna lástima, sin duda.
Gracias por la aclaración y ampliar la información.
EliminarSiempre es interesante conocer más sobre lugares que en algunos casos son fuente de polémica.