RAQUETAS EN LLANOS DEL HOSPITAL - PIRINEO ARAGONÉS

Llega el invierno y nos preparamos para disfrutar de la naturaleza en “modo nieve”. Nos fuimos al Pirineo Aragonés, el mejor destino de nieve de España.

Y es que el Pirineo, en Aragón nos ofrece un buen número de alternativas para hacerlo.
En esta ocasión, nuestro destino sería el Valle de Benasque que posee un espectacular paisaje pirenaico en cualquier estación del año, con los picos más elevados de Aragón, con la estación de Cerler, la más alta del Pirineo Aragonés para practicar el esquí alpino y con los Llanos del Hospital para el esquí de fondo, el nórdico y de travesía o calzarse unas raquetas y disfrutar de un paseo único.

Esta última alternativa fue nuestra elección aceptando la propuesta de nuestros amigos Luis y Sabine de Siuler Viajes y Fotos, aunque tendríamos acometer dos intentos para poder disfrutar de este paseo en blanco.
El primer día, la estación estaba cerrada y por tanto, protección civil no nos permitió el acceso. La carretera estaba abarrotada de coches aparcados a los lados, había sido un día en el que se había colgado el cartel de completo en muchos alojamientos de la zona. Así que decidimos hacer una caminata por los alrededores resbalando por el hielo que se había formado en los caminos y estallando en carcajadas cuando uno u otro se mantenía en pie de forma precaria evitando heroicamente una caída.

Al día siguiente decidimos madrugar más y la suerte nos sonrió. Pudimos bajar hasta el aparcamiento del hotel de los Llanos del Hospital y allí tomarnos un reconfortante café antes de emprender nuestra aventura.
Cerca del hotel, se puede alquilar equipo. Unas raquetas con bastones cuestan 13€.
Cuando nos las calzamos comenzamos a caminar. Para algunos era nuestra primera vez, nos estrenábamos en esta actividad y la verdad, no resulta complicada a pesar de que mi psicomotricidad roce cotas negativas.
Yo ya había hecho parte de este recorrido en verano y en realidad me resultó más sencillo con las raquetas y con el camino cubierto de nieve.

El paseo es realmente bonito, una estampa invernal maravillosa, con los árboles nevados, los caminos totalmente cubiertos por una gruesa capa de nieve y las montañas al fondo imponentes y blancas.

Tuvimos diferentes fenómenos meteorológicos en nuestra ruta, el cielo estaba cubierto al principio y rompió a nevar, con ventisca incluida para terminar abriéndose y mostrando un cielo azul con las montañas observándonos al fondo, magníficas.
Tomamos el camino de regreso después de una hora caminando, sin acusar ningún cansancio, pero teníamos que volver por el mismo lugar y llegar a tiempo a comer con los amigos que no habían podido unirse hoy a nosotros.
El Pirineo Aragonés es el más salvaje y lo hace perfecto para encontrarnos con las montañas, con los bosques, lagos o ibones, respirar aire no contaminado, disfrutar de la naturaleza y deleitarse de todo lo que nos ofrece.

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